El joven se detuvo en el semáforo con precaución . A los pocos segundos escuchó la sirena de la policía y la luz intermitente de la patrulla hiriéndole los ojos.Dobló rápidamente a la derecha al escuchar la sirena. En ese mismo instante, el auto que venía tras el suyo se comió la luz roja. Una segunda patrulla encendió la sirena y siguió al conductor irresponsible.
El joven se detuvo y esperó al policía para argumentatle que no había violado ninguna ley. La mujer policía se acercó, cotejó el marbete y luego le pidió los documentos habituales; la licencia del auto y su licencia de conductor. El joven malhumorado le entregó los documentos. La mujer policía se detuvo completamente, dio dos pasos atrás y luego le preguntó:
-¿ El nombre que aparece en la licencia es nombre o su apodo, joven?
-Oficial, ese es el nombre que mis padres me dieron desde mi nacimiento.
-¿Está seguro que no se está burlando de mí?
- Le juro por mi santa madre que ese mi nombre de pila es Wichy.
Isocránicamente Doña Clementina esperaba desesperadamente a su hijo junto a su vecina Eugenia, en ese momento le echaba la bendición y le decía:
-Wichy es el nombre legal de mi hijo. Le pusimos ese nombre porque su abuelo paterno se llamaba José Luis Figueroa, le llamaban Wichy; se fue para la Guerra de Vietnam y allá murió en la guerra el día de su cumpleaños. Su hijo, mi difunto esposo , tuvo dos hijos; José Luis el mayor y Damaris la menor. A José Luis le llamábamos Wichy y murió en un asalto en el lugar donde trabajaba el día que cumplía veintiún años. Por eso decidimos ponerle por nombre Wichy y no José Luis al muchacho.
La mujer policía regresó , le devolvió la licencia y le dijo:
- Lo detuve porque las luces traseras de su vehículo no funcionan, pero en consideración a que cumple años hoy. No le voy a dar el boleto pero le advierto que si lo atrapo otra vez sin corregir el desperfecto le doy la multa.
-Gracias oficial la verdad es que cumplí 21 años ayer ya que ahora son las 12:03 de la madrugada.
Y según una superstición familiar debí haber muerto ayer al cumplir los 21 años; eso le pasó a mi padre y a mi abuelo. Ellos se llamaban José Luis y les decían Wichy, por esto mi nombre es Wichy para tratar de alterar la superstición familiar y parece que funcionó.
-Cargando esta superstición yo no hubiera salido de mi casa si hubiera sido usted. Le replicó la mujer policía. Si yo no hubiera puesto el biombo, y no hubieras doblado a la derecha, el auto que venía detrás lo hubiera impactado y quizá lo hubiera matado.
-Gracias oficial. Debo avanzar que mi madre me está esperando.
!Ay, Clementina te voy a decir un secreto! Mi hijo Wichy nació tres días después de la fecha en que lo incribimos. Cumple 21 años el martes pero le hicimos creer que cumplía años hoy para quitarle un poco la presión que podia sentir por la profesía.No pararé de rezar y orar para que nunca le ocurra nada malo pero especialmente el martes.!Bendícelo Dios mío!
-!Mamá, llegué, estoy vivo! Ves que la superstición es falsa. !Wichy Figueroa ha sobrevivido!
*Wichy es un alumno del Repaso del College Board en febrero de 2014.
lunes, 24 de febrero de 2014
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