La Pasión Según Antígona Pérez- Luis Rafael Sánchez (1968)
-Empecemos por donde se empieza siempre. Nombre: Antígona Pérez / Edad: 25 años. Continente: América./ Color: …(sonríe) No importa. Traigo una historia para los que tienen fe. Alguno advertirá:
Es demasiado joven para decir algo que merezca oírse. Cierto que soy joven. Pero esta juventud de del cuerpo ha sido acumulada por la triste vejez del alma. ¡Poesía! Claro que poesía…Si tengo 25 años y voy a morir mañana.
-Quiero hablar de los que crecimos en una América dura, América amarga, América tomada. Los periódicos enfermos de una fiebre amarillista, han inventado una historia que no es cierta. Una historia sin escrúpulos, maligna, improvisada con el afán de destruir mi nombre y mi reputación. (pausa) Habrá pues dos versiones de la misma verdad; la mía, la de ellos.
-La mía, es simple. Comienza por mi nombre: Antígona. Me decían: Antígona donde están tus hermanos , porque no sabía que para llamarse Antígona se necesitaban hermanos. Ni sabía que Antígona era la muchacha joven que se decide por la muerte.
-Mi madre Aurora piensa que el mundo es de una sola manera, Así lo piensa verdaderamente. Personajes principales, secundarios, comparsas. Pero no; cuando un pueblo se levanta contra su tirano, lo condena. Cuando los negros se levantan contra los blancos, los condena. Cuando un esclavo se levanta contra su amo lo condena. Madre, Héctor y Mario Tavárez dejaron de ser mis amigos y se convirtieron en mis hermanos. Los muertos son de sus vivos, no puedo renunciar. Los deberes, como la vida, son intransferibles, mamá. Los hombre grandes no acaban cuando mueren; los que entregan sus vidas para que tú, yo, el otro; vivamos. Esos hombres no mueren.
-Harán lo más terrible. Lo que rebaje mi honestidad , lo que sacuda las raíces de mi resistencia. Violarán mi cuerpo con la esperanza de que violan mi espíritu. El cuerpo, me mancharán el cuerpo porque Creón es el amo de los cuerpos. Pero me dejarán inmaculado el corazón. El corazón es lo que importa. Harán lo más horrible…
-Celebran, beben, gritan. El palacio es fiesta, Molina es fiesta, América es una efervescente, rumbosa, exuberante fiesta. Una vez fermenten las lenguas se tejerá la leyenda.
-Lo trae un encargo, Monseñor. No puedo resolver el problema de la muerte hasta que no resuelva el de la vida. La salvación se gana en vida. Usted asegura que perderé el alma. Apostemos, Monseñor.
Segunda Parte
-La segunda parte comenzará cuando Creón diga: Antígona, te pareces a mí. Creón duda, y dudar es no saber si se está bien o se está mal. Creón está atrapado en un laberinto; si me fusila, la muerte conmoverá la República. Si me deja viva se derrumbarán los temores porque ya no será delito desafiar la ley de Creón.
Hay una noche en que también los tiranos agonizan. Espera esa noche en tu calendario, Creón, cuando todo Molina descubra que ningún pueblo es de ningún hombre, que ningún hombre es de ningún hombre, que cada quien es de su libertad.
-También yo comenzaré a gritar: América, no cedas: América, no sufras; América, no pierdas; América no mueras; América, prosigue; América , despierta; América, tranquila; América, alerta.
- La historia es inevitable, Irene. Las dictaduras se desmembran, tarde o temprano.
-Finalmente, Fernando e Irene también se retiran. Si la fe no manara de uno mismo, qué difícil resultaría vivir. Morir es dar amor, el más grande amor.
-Tendrás que matar no solo a la muchacha irresponsable que enterró los cadáveres de sus amigos, sino a todas las muchachas irresponsables que te saldrán al paso para jugarse la vida. Antígona es otro nombre para la idea viva, obsesionante, eterna de la libertad. Matarme es avivarme, hacerme sangre nueva para las venas de esa América amarga. Aligera, Creón Aligera, Dadme, dadme la muerte.
-Nombre: Antígona Pérez. Edad: Veinticinco años. Continente: América.
*Este monólogo lo formé uniendo los parlamentos más importantes de Antígona Pérez en el drama en dos actos La Pasión Según Antígona Pérez de Luis Rafael Sánchez. La adaptación requirió unos cambios mínimos en los parlamentos para enlazarlos . Al final repetí los versos del comienzo para terminar el monólogo en una nota alta. zerepnomar
* Festival de poemas y monólogos
Excelemte
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